6 modos de ser asertivo y de conseguir lo que quieres

6 modos de ser asertivo y de conseguir lo que quieres

Igual que con cualquier otra aptitud, o naces con la habilidad de ser asertivo o no. Los que no han nacido con esa cualidad, tienen que trabajar hasta mejorar y conseguirlo. Por supuesto, no es algo de lo que debas avergonzarte. Simplemente, algunos no tienen suficiente confianza en sí mismos o no creen merecer las cosas que desean.

A continuación, te mostramos seis estrategias que te permitirán ser más asertivo y jugar el rol que te corresponde.

Empieza poco a poco.

Puede que quieras conseguirlo todo de repente, pero las cosas no funcionan así y tendrás que tomártelo con calma. Igual que con todo lo demás, lo mejor es empezar pidiendo pequeñas cosas como decirle a la gente que recoja lo que ensucia o pidiéndole a alguien que no te interrumpa al hablar. Al principio puede parecerte complicado, pero pronto aprenderás a decir lo que piensas y te resultará fácil exigir esas pequeñas cosas.

Aprende a decir “no”.

Ser asertivo quiere decir perseguir lo que quieres, pero también lo es no hacer lo que no quieres hacer. Es importante que le digas no a la gente de vez en cuando porque no puedes ser siempre como quiere la gente y tener tiempo para ti. Está bien decirles que no puedes hacer esto o lo otro, independientemente de que tengas tiempo o no.

No te sientas culpable.

Si no quieres hacer algo, basta con que lo digas. No deberías sentirte culpable por decirle que no a alguien cuando te piden que hagas algo solo porque no sueles decir que no. Si quieres quedarte en casa leyendo tu libro preferido, adelante. No tienes por qué hacer lo que quieran los demás.

Expresa lo que sientes.

Debes aprender a expresar lo que sientes cuando estás con gente. No asumas que los demás saben lo que piensas y lo que quieres de ellos. De ti depende hacerles ver lo que quieres y, sobre todo, lo que necesitas de ellos.

Reflexiona sobre qué significa ser asertivo.

Cuando pensamos en lo que significa ser asertivo, mucha gente asume que quiere decir ser exigente y enérgico. Pero eso no es cierto siempre. De hecho, se puede ser asertivo sin ser demasiado exigente. Deberías saber cómo preparar esas situaciones y aprender a lidiar con tus reacciones instintivas.

Habla sin tapujos.

Si eres abierto y honesto, los demás te respetarán más que si te andas con rodeos. La gente asertiva tiene tacto cuando le dice a alguien qué hacer, y por ello esa gente te respetará y estarán más dispuestos a hacer lo que les pides. Y no olvides que cuando eres asertivo, las formas son importantes.